Sobre

Paco Costa

Me asomé al mundo un 1 de Julio de 1981, en plena operación salida de vacaciones de verano. Soy el pequeño de dos hermanos. Mi hermana, 5 años mayor que yo, andaba loca con Mecano, Madonna, Hombres G, Alejandro Sanz, y todo lo que salía en la revista Super Pop. Yo desde mi habitación me empapaba de todo aquello, incluso Acid Mix.

Ya desde bien pequeño sentí curiosidad por todo lo musical, me encantaba tocar el tambor, todo tipo de percusión, también tapar las cintas de cassette con celofan para grabar encima, de hecho mi hermana guarda un hit de cuando tenía 6 años, donde ya pongo acento flamenco con una letra inventada, letra poco ortodoxa para los tiempos que corren…algún día la mostraré.

No sé muy bien donde nace mi afición al flamenco, porque en mi familia se escuchaba música pero no flamenco, excepto mi abuelo materno que guardaba cintas de Perlita de Huelva, Porrina de Badajoz, La niña de los Peines….Tal vez de ahí. En el coche de mis padres sonaba, Diango, Julio Iglesias, Donna Summer, Joe cocker.

Recuerdo las horas que pasaba con un teclado Casio blanco pequeño, que hasta se podía grabar lo que uno tocaba! Increíble. Mayor fue mi sorpresa cuando hace unos años lo encontramos de nuevo y se lo dejé a mi sobrina y todavía quedaba una frase grabada por lo menos 25 años atrás. Ahora es mi hijo el que trastea con el Casio.

En el apartamento donde veraneábamos había una guitarra pequeña, que le tocó a mi madre en la feria. Yo siempre andaba hurgando en ella, rasgueando…ese sonido ya me atraía. Un verano hice a mi padre ir a la ciudad a ponerle cuerdas. Ahora me imagino a ese pobre hombre entrando en la tienda con esa guitarrita de feria pidiendo cuerdas. Recuerdo la tienda y el brillo de los bordones nuevos.

Ya con 16 años, en el instituto, me seguía persiguiendo la inquietud, y fue mi amigo Jorge quien me puso los primeros acordes, por lo cual le estaré agradecido toda la vida.

Era esa época en la que los amigos nos alquilábamos plantas bajas en navidades, donde sonaba a todas horas Los chichos, Camela(me encantan, que conste en acta), Chunguitos, Tijeritas, Bernardo, Junco, Los Calis…

Con mi amigo Simón, único amigo al que le gustaba el flamenco, empecé a escuchar a Camarón y a poner acordes para acompañar al cante, y seguidamente ya empecé a curiosear con Ketama, Pata Negra, Kiko Veneno, José El Francés, Carmen Linares, Enrique Morente, Camarón ya me pilló en el disco de Potro de rábia y miel, igual por eso es mi favorito.

También pasé por la etapa Dj, recuerdo que me guardaba la paga y cuando juntaba 1000 pesetas me iba a Contraseña Records a por un disco. Mi amigo Salva y yo echábamos muchas horas simulando que éramos una emisora de radio, incluso hacíamos como si la gente llamara por teléfono para dedicar canciones, pero éramos nosotros mismos cambiando la voz  jajaj, que penita jaja. De esto hay grabaciones.

Desde que aprendí unos pocos acordes, ya sentía la necesidad de escribir canciones. A los 19 años montamos un grupete, con bajo, guitarra eléctrica, flauta y guitarra española, grabamos 2 temas con mis letras. Espero encontrar esos temas algún día.

Continué mis estudios de Ingeniería de sonido en la EPSG de Gandía y ya la guitarra formaba parte de mí, el flamenco era lo que me gustaba y busqué a alguien que me enseñara de qué iba esto del flamenco. Estudié con los maestros que tenía a mi alcance, José El Minero principalmente, y un breve pero fructífero tiempo con Ricardo Esteve.

Durante la carrera en Gandía hice muy buenos amigos, también muchos de ellos enrolados en la búsqueda musical, a todos nos gustaban los aparatitos pero en el fondo, y mucho más, la música.

Después de unos años ejerciendo en la ingeniería acústica, dentro de mí sentía la necesidad de dedicarle más tiempo a la guitarra  y decidí ampliar mí  formación.

Estudié en Madrid en la escuela de Cañorroto con el maestro El Entri. Aquella escuela siempre me había gustado, y allí fue donde adquirí unos buenos cimientos para luego poder desarrollarme como músico. Además seguí  formándome (y lo sigo haciendo siempre que puedo) asistiendo a cursos con Rafael Riqueni, Chicuelo, Daniel Casares, Juan Cortés, Salvador Gutiérrez, Antonio Sánchez, Jose Andrés Cortés, Yerai Cortés, Niño de Pura.

Poco a poco empecé a meter la cabeza en las escuelas de baile, que son imprescindibles en la formación de un guitarrista flamenco, y así lo fueron para mi, y de ahí llegaron los primeros conciertos con baile, que es lo que más me gusta.

Esto me ha permitido poder trabajar con grandes artistas y compañeros como Jesús Aguilera, Manuela Morales, Paula Sanjuan, Daniel Navarro, La Negra, Paco Berbel, Sandra Ruiz, Carlos Ruiz, Yessica Sanchez, Cristian García, Pedro Medrano, Julia Asins, Ana Lloris, Verónica Llavero,  Alberto Marques, Joaquin el Duende, Juan de Pilar, Juanma Maya, David Sabariego, Almudena Pardal, Sergio Calero, Antonio Vieira, Simón Cortés, Tania Salazar, Javier Calderón, Tomás de Los Cariños, José El Negro, Selene Fernández…con los que he aprendido y sigo haciéndolo, el lenguaje de este maravilloso mundo que es el flamenco.

La parte docente y pedagógica siempre me ha gustado, y recuerdo que desde los primeros acordes que aprendía, ya trataba de enseñarlos a mis amigos. Con el tiempo he tenido la oportunidad de ayudar en su aprendizaje,  a un montón de gente apasionada con la guitarra, de poder ser su guía, su compañero de camino durante una etapa de sus vidas, donde he podido transmitir mi propia experiencia, mostrar errores que yo había cometido, y facilitar herramientas para que cada uno emprenda su propio viaje.

 

Hoy día compagino la docencia con los conciertos, los tablaos, la composición de música y canciones y la colaboración en compañías de baile.

Si quieres te acompaño en tu camino, empieza ahora mismo!

Escucha esa vocecita que te grita sin cesar…”sigue tu pasión, sigue tu pasión…”